Uganda
Contexto
El asentamiento informal de Naguru se encuentra en las afueras de Kampala, la capital de Uganda. Es aquí donde se ubica nuestra academia socio-deportiva. El asentamiento de Naguru no alcanza los estándares mínimos de saneamiento establecidos para el acceso de agua, la vivienda, y la educación. Además, a pesar de la obligatoriedad de la educación formal, un número significativo de niños y niñas no tienen acceso a la ésta.
Debido a esto y a la situación socioeconómica de la mayoría de las familias, muchos niños y niñas no ven garantizados estos derechos humanos, lo cual afecta a su salud y a su vida académica y psico-social. Este escenario se ha visto empeorado por la pandemia de la COVID-19, que afectó al país y obligó al gobierno a cerrar todas las escuelas durante casi dos años. El cierre de los centros escolares también perturbó la socialización normal de la mayoría de los niños, las niñas, y los jóvenes, aumentado los casos de estrés y ansiedad.
En la comunidad, algunos niños también han estado expuestos a la violencia de género, incluyendo la violencia doméstica y sexual. Debido a la falta de educación sexual y la desinformación generalizada hay altas tasas de embarazos adolescentes, enfermedades de transmisión sexual y enfermedades relacionadas con la higiene. La falta de un entorno de protección en la comunidad ha afectado enormemente a los niños, niñas y jóvenes de la comunidad y es necesario que las partes interesadas ofrezcan soluciones sostenibles a sus necesidades educativas y sociales.
El proyecto: la MTN Naguru Social Sports Academy
La Fundación Xcalibur, de la mano de la Fundación Real Madrid y MTN Uganda, ha implementado la primera escuela socio-deportiva en Uganda.
La academia socio-deportiva acoge a 166 niños y niñas de entre 5 y 16 años, en situación de vulnerabilidad. El proyecto incluye la participación de niños y niñas con necesidades especiales. El objetivo es proporcionar una formación social y educativa a los beneficiarios, centrada en los principales valores del crecimiento personal y el deporte, acompañada de la práctica deportiva y el aprendizaje del fútbol.
Nuestro socio local en terreno, la ONG Youth Sport Uganda, se encarga de ejecutar el proyecto a diario. A través del deporte, los juegos, el apoyo de los entrenadores, así como la sensibilización de la comunidad, el proyecto pretende influir en tres niveles diferentes: los niños y las niñas, los jóvenes y la comunidad en general (familias, tutores y cuidadores, profesores, organizaciones internacionales/locales y gobierno).
El proyecto tiene lugar en la escuela pública Naguru Katali Primary School, en el distrito de Nakawa, Kampala. Los entrenadores, la trabajadora social y profesores del colegio han sido formados bajo la metodología única y pionera de la Fundación Real Madrid de educación en valores: “Por una educación Real: Valores y Deporte”. Estas actividades tienen como finalidad mejorar las habilidades de vida de los beneficiarios y abordarán cuestiones como el bienestar, la protección y seguridad, la gestión de conflictos, la igualdad de género, la discapacidad y la inclusión, para fomentar el desarrollo positivo de los mismos.
Objetivo General
Fomentar la educación formal y continua como base fundamental para el crecimiento y desarrollo personal de 166 alumnos de la escuela primaria Naguru Katali de 5 a 16 años, utilizando el deporte como herramienta motivacional.
Objetivo específico
Reforzar la educación en valores, las habilidades para la vida, los hábitos de vida saludables y los principios de desarrollo personal a través del fútbol para 166 alumnos de la escuela primaria Naguru Katali.
Nuestros beneficiarios
El proyecto está dirigido a 166 niños, niñas y jóvenes de entre 5 y 16 años. Para ser admitidos en el proyecto, los estudiantes deben cumplir las siguientes condiciones
- deben ser alumnos de la escuela Naguru Katali
- deben vivir en riesgo de exclusión social, en entornos socialmente hostiles o
- en cualquier contexto de violencia social y/o pobreza,
- y deben estar comprometidos con la asistencia al colegio.
Cómo lo hacemos
Antes de implantar el proyecto, se realizó un estudio inicial con el fin de seleccionar a los beneficiarios y las beneficiarias más necesitados. Las condiciones de los alumnos seleccionados eran extremas: un 72 % de los alumnos encuestados sufrían depresión, en su mayoría eran niñas. Normalmente entre las edades de 9 y 12 años. Además de cumplir con estas condiciones, debían de estar comprometidos con su asistencia a clase, tener un buen comportamiento en casa (para ello se realizó el estudio a los padres) y ser deportistas. Tras la selección de este grupo de alumnos, empezaron los entrenamientos.
El proyecto se divide en dos partes: la deportiva y la social. Como parte del deporte, los niños entrenan dos veces por semana, en diferentes grupos, separados por edades. La parte social del proyecto está formada por ciertas charlas formativas y los entrenamientos, que se adaptan cada día aun valor determinado. Además, se busca involucrar a todos los stakeholders: los padres también participan en charlas sociales y se busca su colaboración en todo momento. Igualmente, se realizan eventos de vez en cuando.